CARACAS (EFE).— El arquitecto Fruto Vivas, creador de una docena de obras emblemáticas de Venezuela, falleció ayer a los 94 años, noticia que lamentaron funcionarios de gobierno y el chavismo, que lo exaltan como un “revolucionario”.

“Sí, partió a otro plano, pero ese fruto no ha muerto. Dedicó sus 34,548 días a regar semillas de amor y conciencia por la Tierra, por la naturaleza, por la vida. Gracias, Venezuela, por haber parido al maestro Fruto Vivas, arquitecto de una humana humanidad”, expresó en Twitter el ministro de Cultura, Ernesto Villegas.

Las carteras de Interior y Justicia y de Comunicaciones y organismos de Estado publicaron mensajes en redes sociales para expresar condolencias a los familiares del arquitecto, oriundo del estado de Táchira, limítrofe con Colombia.

Fruto Vivas fue ganador del Premio Nacional de Arquitectura y distinguido con dos títulos de Doctor Honoris Causa en su país.

Entre sus obras hay iglesias, clubes, hoteles, museos y plazas, así como la llamada “Flor de Venezuela”, réplica de la propuesta que Vivas ideó para el pabellón venezolano en la Exposición Universal de 2000 en Hannover.

Se trata de una ligera estructura de acero y vidrio con cubierta móvil que se asemeja a una flor y fue instalada en 2008 en el estado de Lara.

Vivas creó igualmente la “Flor de los cuatro elementos”, estructura que parece flotar en un estanque dentro del Cuartel de la Montaña, mausoleo caraqueño en el que descansan los restos mortales de Hugo Chávez, quien gobernó Venezuela entre 1999 y 2013.

Evento para las familias, en el local de la CTM