Solución simple. Por sus ventajas y comportamiento, las losas con viguetas de hormigón son un sistema muy utilizado en nuestra región. Características de la obra. Precios.

Las losas para techos y entrepisos ejecutadas con el sistema de viguetas de hormigón preelaboradas o pretensadas simplificaron la técnica de ejecución del hormigón tradicional y disminuyeron considerablemente los costos, al eliminar el uso de encofrados.

Estos materiales forman la estructura principal del techo aligerado y son fabricadas con concreto y acero de alta resistencia en instalaciones totalmente automáticas. No sólo eso: además, consiguen optimizar los tiempos y mejorar la calidad de construcción.

Constituyen la armadura de la losa, ya que tienen por función absorber las tracciones que se producen en el forjado.  Son elementos semirresistentes, pues en sí mismas no constituyen una estructura, debiendo completarse con la capa de compresión.

Las viguetas tienen una sección de hormigón constante, y su forma es la de una “T” invertida. La resistencia de las viguetas varía según la cantidad de armadura y la excentricidad de las cargas de pretensado: de esta forma, se diferencian las series de producción estándar, que se adecuan a los requerimientos del cálculo.

Es importante tener en cuenta que la fabricación industrial de las viguetas -con hormigones de gran resistencia (300 kg/cm²) cuya tensión inicial es proporcionada por gatos de tensado hidráulico con controles manométricos- garantizan un producto final de calidad óptima.

Estas losas necesitan de las bovedillas o bloques para techo, junto con el hormigón de la capa de compresión, con la armadura de distribución, y refuerzos de nervios para constituir. Se trata de materiales que se tensan antes de hormigonar, y que posteriormente (al destensar) transfieren su carga al hormigón. Se fabrican en plantas industriales con moldes deslizantes, o por extrusión.

Antes del hormigonado de las viguetas, los alambres de acero se estiran y anclan temporalmente contra dos apoyos (uno fijo y otro móvil). Cuando el hormigón adherido al acero vibrado y curado adquiere la resistencia específica, los alambres de alta resistencia se liberan lentamente de sus anclajes, transmitiendo su fuerza al hormigón. Las viguetas son fabricadas con acero de probada calidad y alto límite de rotura.

Las viguetas se colocan sobre los muros de mampostería, vigas de acero o vigas de hormigón, a no menos de 8 centímetros. Para dar la distancia correcta entre viguetas, se ubican bloques de la bovedilla a usarse en los extremos; de esta forma, se establece automáticamente la separación entre ellas.

Una vez instaladas las viguetas, y antes de colocar las bovedillas, es necesario realizar el apuntalamiento, que tiene como propósito evitar la flexión de las viguetas en el llenado, accidentes o roturas en esta etapa del proceso de la losa. La distancia entre las líneas de apuntalamiento debe ser como máximo de 2 metros, y los puntales de 1.5. Siempre habrá que cuidar la base del terreno, de modo que se presente firme, o bien colocar tablas (para evitar el hundimiento de los puntales).

Luego, se instalan el resto de las bovedillas de hormigón, cerámicas o poliestireno expandido, asentándolas y ajustándolas lo más posible. Además, es necesario agregar una armadura a modo de repartición, para absorber los efectos de dilataciones o contracciones, con una malla de construcción de 4,2 de diámetro cada 15 centímetros.

· Lavado. Una vez instalados los elementos anteriores, deben eliminarse los residuos de construcción para permitir la perfecta adherencia del hormigón de la capa de compresión. Se mojan los bloques abundantemente hasta que no absorban más agua, garantizándose así el buen llenado y la resistencia del hormigón.

· Hormigonado. Es el momento final, que debe contar con las proporciones adecuadas de componentes: 1 parte de cemento, 3 de arena y 3 de agregado grueso (piedra partida o canto rodado). La relación de agua debe ser 55 litros cada 100 kilogramos de cemento. Es clave que el hormigón cubra bien los espacios entre las vigas y bovedillas y que su espesor no sea menor a 5 centímetros por encima de la parte más alta del bloque. En épocas de calor, debe mantenerse húmedo el sector durante 3 días, y no resulta conveniente realizar esta tarea cuando la temperatura se encuentre por debajo de los 5º.

Las losas que se construyen con estas viguetas presentan una serie de características que las transforman en las más utilizadas en construcción de viviendas. Se destacan:

· Rapidez en el proceso de ejecución de obra.

Vigueta pretensada de hormigón de 1 metro de largo con 3 trenzas de acero. $  36

Vigueta pretensada de hormigón de 4 metros de largo de materiales de calidad $ 140

Fuente: relevamiento propio en negocios del rubro.

· Menor cantidad de concreto por m2, aproximadamente entre 10 y 25%.

· Eliminación del entablonado o encofrado.

· Las viguetas que se apoyan sobre una viga a vaciar deben apoyarse 5 cm, como mínimo.

· Las que se apoyan sobre viga o muro existente, 10 centímetros.

· No se aconseja modificar las viguetas (usarlas tal cual salen de su planta de producción).

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La Voz del Interior. Fundado el 15 de marzo de 1904. LaVoz.com.ar. Lanzada el 21 de septiembre de 1996. Año 24. Edición N° 9493. Registro intelectual 56057581. Domicilio legal: La Voz del Interior 6080 – CP: X5008HKJ – Córdoba, Argentina. Propietario: La Voz del Interior SA. Gerente General: Juan Tillard. Director: Carlos Hugo Jornet. Editor: Carlos Hugo Jornet.

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